15 de diciembre de 2011

Para mí, una grapita...

Antes que nada aclaro que, para mí, "Whisky" es sin dudas, la mejor película uruguaya de la historia. Está bien que esa historia no es muy abundante en títulos pero creo que es el filme más valioso que se realizó en el paisito. El problema es otro.

No he visto el 100 % del cine uruguayo pero he visto la mayoría. La película de Rebella y Stoll es inteligente, sutil, madura. Sabe lo que quiere decir y lo dice bien. Ha ganado un montón de premios y menciones y ha sido nuestra carta de presentación para que se realicen muestras del cine compatriota en el mundo.

Lo malo que yo encuentro es que algunos quieran creer que todas -o casi- nuestras películas tengan que ser en el estilo de "Whisky". La mayoría de las películas uruguayas nos muestran personajes con problemas patológicos de comunicación con todos sus semejantes, algo que parece muy poco natural. Acepto que somos un pueblo gris, poco comunicativo, introvertido y más bien melancólico. Pero en nuestro cine solemos ver permanentemente a gente que roza el autismo. Más allá de si esa característica se acerca a nuestra idiosincracia o está exagerada, cansa bastante verlo en tantos títulos.

Una cinematografía que podría compararse con la nuestra es la rumana. De moda en el circuito de festivales desde hace unos años, las películas que se han podido ver aquí no son hechas con más dinero que las nuestras, pero sí con mucha más imaginación y variedad. Son mucho más jugadas que las nuestras y dudo mucho que allí tengan grandes facilidades de producción, que sean inalcanzables para nosotros.

Nadie pretende que en nuestro país realicemos una "Avatar" ni nada que se le parezca. Hay en el mundo un público atento a las buenas películas, aunque procedan de países "exóticos" como Uruguay, Rumania o Taiwan. Y lo que está pidiendo son filmes diferentes a la rutina mercantil que domina la distribución en todo el planeta, sin excepción. No exige grandes efectos por computadora ni estrellas publicitadas, sino simplemente CINE. Imaginación, inteligencia, audacia, sarcasmo, fantasía y una mirada honesta (ni publicitaria o patriotera pero tampoco miserabilista) sobre la tierra propia.

No necesitamos muchos dólares. Ni publicidad ni importar nombres de otros países. Ni siquiera realizar esas coproducciones híbridas con elencos multinacionales. Nuestro cine necesita imaginación y desenfado.

Y libretistas. Muchos directores y/o productores escriben sus propias películas, probablemente desconfiados de que alguien les pueda hacer un libreto competente sin traicionar sus ideas. Probablemente nunca en su vida vieron un libretista profesional. Tampoco el cine uruguayo estimula su formación. Y eso se nota.

8 comentarios:

Detaquito dijo...

DE acuerdo con lo que dices, mi estimado Alvaro.

UNa de las peliculas uruguayas que me gusto fue Ruido, no se si la viste?

Hybrid Willow dijo...

Tienes razón. Es hora que la narración cinematográfica introduzca ciertos aspectos de lo que hoy se denomina "el nuevo uruguayo"...

Porque...ya no somos autistas...

Alvaro Fagalde dijo...

No vi Ruido. Creo que era una comedia, lo que puede ser interesante porque tambien le falta humor al cine uruguayo.

Hybrid: ¿que querés decir exactamente con "nuevo uruguayo"?

Detaquito dijo...

Si, soy medio malo para todo lo que respeta al cine, pero digamos que encuadra en lo que vendria a ser una comedia, algo tragica, pero comedia al fin.

Yo la recomiendo, lo cuan no es mucho...

andal13 dijo...

Ah, sin dudas "Whisky" es un peliculón, sea uruguayo o uzbeko.
Igual, otras películas nuestras me han gustado mucho, no solo esa. Pero es bien cierto que hay que animarse a tirar más la chancleta (o el rollo de película). Como bien decís, hay cinematografías tan pobres -o más- que la nuestra, y hacen verdadera joyas.

Alvaro Fagalde dijo...

Hay que jugársela. Y meterse en proyectos que puedan interesar al público, más allá de los egos de cada uno.

La gente está dispuesta a bancarse una propuesta complicada, pero eso no quiere decir que se pueda complicar al cuete. Podemos hacer películas difíciles, no comerciales, pero que interesen a la gente.

Christián dijo...

Estimado: Comparto mucho de lo que dice. Especialmente, me rechina como a usted esa tendencia de intentar hacer películas con ese formato gris que tanto nos atribuimos. A mi Whisky me gusta mucho. Pero si tuviera que elegir, me quedo con "El baño del Papa" y con "Mal día para pescar". Esas tres son para mi las mejores películas que se han hecho en el paisito.

Alvaro Fagalde dijo...

Es probable que sean las mejores, Cristian. A mi me paspan un poco las películas sobre "perdedores", no sé por qué, pero "Mal día para pescar" está muy bien hecha. La de Artigas está muy bien, también.

Al margen de podios y gustos, lo importante es abrir un poco la cabeza y jugarsela. Es lo que creo que falta. Y narrar bien.