+ Yo suelo caminar más rápido que el promedio de los uruguayos. Es muy común que durante mis obligadas caminatas -por una operación en una rodilla- me encuentre con gente mayor (o no tanto) que, sobresaltadísima por ese taconeo que se les acerca, reaccionan de la misma manera que si se le viniera arriba una patota de skinheads gritando y golpeando sus cadenas.
+ Mi madre tuvo una época -creo que felizmente superada- en que no quería dejar pasar a nadie para que entrara en la casa a arreglar algo, por más documentación que tuviera de que era de UTE, del cable o del service del lavarropas. Por suerte, no era porque hubiera sufrido alguna situación desagradable, sino por otra cosa.
+ En el gimnasio donde trabajé hasta hace 2 años iba una señora negra a hacer su tratamiento, al igual que los otros alumnos, blancos. Siempre iba a esperarla su hijo -también negro, se imaginarán- de unos 10 años de edad a la salida y era muy frecuente que la gente que se iba me advirtiera de su presencia para que tuviera cuidado de que no fuera a robar.
Tengo una mala noticia para vendedores de armas y de cercas electrificadas (y también para determinados políticos de la oposición): Montevideo sigue siendo -relativamente- la ciudad grande más segura de América Latina. Por supuesto que eso no quiere decir -ni por casualidad- que no hay delincuencia y poco le puede importar esa estadística al que sufre un delito violento. Pero de ahí a aceptar y compartir la increíble campaña de terror que llevan adelante varios medios televisivos y de prensa hay un abismo.
Nunca está de más recordar que no hay opinión, noticiero o trabajo periodístico alguno que sea objetivo. Esa discusión está terminada desde hace décadas, pero aún la enorme mayoría de la gente olvida que cuando, por ejemplo, ve un programa televisivo que hable sobre un tema (cualquier tema) NUNCA va a estar viendo LA VERDAD sobre ese tema. Que SIEMPRE los testimonios que recibe fueron seleccionados de entre muchos otros que podrían estar en su lugar y que incluso, el montaje, el orden y la manera en que son presentados influyen en el mensaje que recibe. La diferencia mayor es que algunos son HONESTOS y muestran las dos campanas que siempre hay -por lo menos dos- sobre todo tema y MUCHISIMOS otros -la enorme mayoría- se presentan como la única visión posible, con un formato como diciendo "esto es así y el que piense distinto es un estúpido".
En primer lugar: ¿es que acaso ahora hay inseguridad y hace poco no la había?. La respuesta es una sola: por supuesto que no. No hay ninguna estadística ni ningún dato de cualquier tipo que permita decir algo tan disparatado. Antes del 1 de marzo de 2005 había mucha delincuencia y muchos delitos con mucha violencia. Siempre lo hubo. Basta con ver la prensa de la época de la dictadura y también de los gobiernos de los partidos tradicionales. La afirmación en blanco y negro de que antes había seguridad y ahora no es además de falsa, infantil.
¿Puede ser que antes se combatiera más y/o mejor que ahora?. Nuevamente las estadísticas de un lado y de otro demuestran lo contrario. Hay mucha más policía en las calles y muchos más arrestos. ¿Debido a qué es la superpoblación carcelaria?. Algunos dicen que con los milicos los delincuentes no jorobaban. Diganme -respondo yo- alguna medida concreta a favor de la seguridad en las calles que hayan aplicado. Las únicas medidas que tomaban era para aniquilar a quienes pensaban distinto, que es otra cosa.
¿Cómo empezó todo ésto?. Creo que por un lado, se comenzó a dar una progresiva trascendencia e importancia a las noticias policiales a las que tanto en diarios como en noticieros televisivos o radiales siempre se había dejado de lado como secciones secundarias. La repercusión fue buena y se siguió en esa línea porque los programas periodísticos de los grandes medios no se basan -ni se basaron jamás- en intereses sociales o profesionales sino en lo que VENDE más. Y comprobaron que la gente -cierta gente numéricamente muy importante- pedía más morbo, más reportajes hirientes a víctimas de un hecho de violencia, más marginalidad y más pedidos de venganza. Para mejor, vino un gobierno que no les gustaba, con una política opuesta al gatillo fácil...
Detrás de todo esto está la idea que quienes llevan adelante esta campaña de intimidación no se animan a decir directamente: "a los delincuentes se los combate cagándolos a palos y, mejor aún, matándolos". No hay ningún hecho que permita afirmar que ésto es así. Por supuesto que hay que atacar al delito, eso nadie lo discute. Y por cierto, que me opongo a cierta izquierda con varios folletines atrasados que suele afirmar que todos los delincuentes son víctimas sociales y que todo se va a resolver cuando haya mejor reparto de la riqueza. Pero la actitud que buscan Telenoche 4, El País, Ultimas Noticias y sus competidores -que temen quedarse atrás- es fomentar el deseo de venganza y represión. "A los violadores habría que caparlos o meterles un fierro hirviendo en el culo" no es una frase valiente ni solidaria, sino todo lo contrario. Llama la atención que quienes fomentan la violencia -o la pena de muerte- contra los delincuentes sean los mismos que apoyaron la impunidad a quienes cometieron los peores delitos en la historia del Uruguay.
Otra preguntita: ¿por qué los Telenoche y similares no suelen documentar los delitos que se cometen en los barrios de clase alta?.
4 comentarios:
Vo, dejales a los noticieros de la noche que hablen de algo... ¿Cón qué llenan las 3 ó 4 horas que duran, si no?
Nunca, pero nunca le meten un micrófono en el ojo a una señora de Punta Gorda cuando su hijo fue atropellado por un conductor ebrio, y le preguntan cómo se siente. Para qué si venden más los "reportajes" a las señoras del 40 semanas... que además, no están en condiciones de hacerles un juicio.
En Lima para que un robo salga en la tele tiene que haber balazos. A las 9 de la noche no anda nadie caminando (excepto los sabados) y hay un milico x cuadra en los barrios pituacos y en la TV -que es mucho mejor que la nuestra- no andan haciendo tanta bulla.
Andrea: te desconocía ese "vo"
¿Telenoche? ¿Que es eso?
Mi abuela mira Croniquita TV (la filial de Cronica en Uruguay)
Dice que es horrible, que la calle es un paligro, que no se puede salir, que por eso a las 7 cierra toda la casa y se acuesta a dormir, y que poe el miedo no levanta mucho las percianas, porque le miran las cosas que tiene dentro de la casa.
Si, es un juicio digno de una persona fuera de sus cabales, y que como has dicho no es la unica, hay una inmensa franja de morbosos que consumen eso y lo aplican a su vida cotidiana para despues quejarse de ello, y comentar que horrible que esta todo AHORA.
¡Con los blancos (en algunos casos, aplicable tambien a los milicos) se vivia mejor!
Los nazis prometieron esterilizar y/o ajusticiar a todos los delincuentes, ya que vamos al caso.
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